miércoles, 29 de febrero de 2012

- Girl, you'll be a woman soon

Empezamos Marzo y yo en las mismas, que tristeza de vida y que fuerza de voluntad la mía ¿eh?




Vive en Madrid con su novia y aun así cada vez que viene, sigue buscándome. Si yo no atendiese a sus llamadas ¡mini punto para el equipo de las chicas! pero como me gusta tanto y soy medio retrasada: CAIGO (una y otra vez, sin parar).
Si lleva un año con ella y a mi me busca para tener sexo, sólo se me ocurren 3 posibilidades:

- Ella es muy mala en la cama
- Yo soy muy buena en la cama
- No la va a dejar y se aprovecha de mi estupidez constante (y mis habilidades en la cama)

Ana, el amor de mi vida y la persona con más fe en el amor que conozco, dice que me quiere...

Así que la conclusión final viene a ser más o menos la de siempre, o me busco a otro (que ya lo intenté y no funcionó porque las comparaciones son odiosas) o me voy a Inglaterra de una vez para no verlo más o me meto a un convento en Nepal.
Sugerencias aquí, gracias.

lunes, 29 de agosto de 2011

¿Se puede llegar a un futuro teniendo presente al pasado?


Esas palabras que siempre deseé escuchar me matan cuando no salen de tu boca...




¿Porqué él sí es capaz de decírmelas, de sentir eso por mí y tu no? ¿Porqué? Es esa la pregunta que ha debido tener respuesta desde hace mucho tiempo.

martes, 23 de agosto de 2011

Con las ganas (...)

Estoy haciendo la imbécil, no sé a quien pretendo engañar... Si a mí misma, a ti o a todos los demás que piensan que nunca lo superaré. Tal vez pase eso.

Siento agobio, cansancio por luchar una y otra vez contra mis propios instintos y sentimientos y para colmo, como si eso fuera poco, culpabilidad.
Me siento culpable porque, sin quererlo, lo estoy usando para poder olvidarte.

Aun no asimilo el grado de estupidez al que se puede llegar cuando uno está enamorado (si es que es eso lo que yo siento por ti). Él, que me lo quiere dar todo aun sabiendo el lastre que llevo, se merece algo más. Sabe a ciencia cierta que no puedo, a pesar de que lo intento, lo tiene tan claro como que tú aun me tienes aquí.




Que fastidio me da reconocerlo. No paro de recordarme una y otra vez que tengo que avanzar, que no debo perder mi tiempo con alguien que se fue sin darme explicación alguna y ya ni tan siquiera sé para que me quiere cuando vuelve...

Anoche caí en la cuenta de que a ella sí le dices "Te quiero"

lunes, 22 de agosto de 2011

¿Temido o deseado?

Llevo días con la sensación de que se le puede escapar en cualquier momento. Lo noto y la sola idea me paraliza.

Que te digan "Te quiero" es algo que, a día de hoy y sobre todo para mí, tiene varias interpretaciones. Como soy una escéptica en esto del amor, casi todo lo que vaya de la mano del romanticismo me provoca la risa.

No es que no sea romántica, es que ya no me fío. Esas dos palabras son algo muy serio. Sin ir más lejos, yo sólo lo he dicho en dos relaciones (de tres que se pueden contar como serias aunque la última no estuviera muy bien definida). Así que con quien único me permito el lujo de repetirlo con frecuencia es con mi relación más estable, Ana.

Para mí hay dos tipos de te quiero bien diferenciados entre sí. Están el "te quiero" clásico y con aspiraciones románticas de toda la vida y el "te quiero mucho" que más bien lo que te deja es sin respiración para los restos. ¡¿Mucho?! Vamos, eso no se hace. No hay peor coletilla en el mundo cuando una persona que te gusta de verdad, añade ese "mucho" al final (Ey! Que te tengo cariño... Como a mi perro!)




Este último año he estado esperando esas dos palabras como una loca y lo único que he conseguido es, sin saber bien a base de qué y cómo, no volverme loca. Al final ya es que lo asumes y dejas de soñar.

Sin embargo ahora lo temo. Supongo que porque no siento que te quiero, porque aunque piense que eres el más indicado no eres el soñado y sobre todo porque se me quedaría esa cara de idiota de cuando no sé que decir...

viernes, 19 de agosto de 2011

Justo 1 año después...

He estado retrasando este momento hasta que ya sentía que no podía hacerlo más y ha sido justo hoy, un año después, cuando me ha venido la inspiración divina.
Supongo que entre muchas de las razones por las que no me animaba a volver a escribir, está la de que han pasado demasiadas cosas este año, lo que en parte me dolía. Es por esto que decidí aguantar a ver si cambiaba el viento soplando a mi favor, dada mi condición de optimista (siempre le intento ver la parte positiva a todo "¡Si la vida te da palos, construye una cabaña!") aunque lo único que he tenido a ciencia cierta, ha sido un año más de aprendizaje.

A los pocos días de escribir mi último post, me dejó.


Surgieron varias situaciones, casi todas con el mismo marco y la misma sensación, fui presa de sentimientos encontrados y aunque siempre mantuve la ilusión de que volvería a buscarme (cosa que hizo durante varios meses) en el fondo siempre supe que no lo haría de verdad. Que no vendría para quedarse.
Duele ver como una persona a la que consideras tu media naranja se va, diciéndote lo maravilloso que fue todo pero que aun así, no sabe bien por qué, lo vuestro no puede ser...
Me lío, me lío porque es mi rutina desde hace un año, estar hecha un mar de dudas y pensar en lo diferente que podría haber sido si no hubiese tenido tanto miedo.




A día de hoy, le doy consejos sentimentales a mi mejor amiga. Es curioso cuando ni yo misma sé bien que debo hacer la mayoría de las veces. Lo único que he aprendido es a ponerme una venda e ir a trompicones hacia adelante, intentando no mirar atrás, recordándome que ahora él tiene una pareja (sí, el mismo que huía de los compromisos) y creyéndome fuerte a base de repetírmelo una y otra vez.


Mirando mis relaciones desde fuera, tampoco es que haya tenido tan mala suerte. Dejé a mi primer novio, que me trataba como una princesa pero que vivía a miles de kms de aquí, por el segundo. El segundo que me decía que me quería, me era infiel, de ahí mi desconfianza e inseguridades. Y cuando por fin me animé a dejarlo, cuando ya estaban desgastadas tanto la relación como yo, apareció ÉL. Ese que nunca me prometió nada y sin embargo me lo dio todo.
Supongo que por eso fue la vez que más dolió, supongo que por eso aun duele.

Me he vuelto desconfiada hasta tal punto que me da pánico mostrar cualquier mínimo sentimiento. Me auto-censuro pensando que así me protejo. No sé si estará bien pero por lo menos me aseguro algo de estabilidad (aun corriendo el riesgo de hacerme de hielo).

Yo soy muy de señales, no sé porqué siempre acabo viendo algún tipo de mensaje oculto destinado única y exclusivamente para mi. Supongo que lo de retomar el blog hoy es un signo para que avance de una vez, no puedo tomármelo de otra forma. No más el vivir anclada en el pasado, no puedo seguir anclada a ti cuando fuiste tú quien decidió tomar otro camino.

Carrie estuvo 10 años esperando a Big... Así que sabiendo eso, no debería cometer el mismo fallo, sobre todo porque nadie me asegura que se viva el mismo final.
Sabemos que te quiero pero ya se acabó el pensar que sientes algo especial por mi. No lo has demostrado y no me puedo empeñar en alargarlo más. Hay otra persona que se esfuerza por agradarme, para que baje un poco la guardia y sobre todo para que me olvide de ti. Sería justo para ambos.
Sería lo más justo aunque tu no lo hayas sido conmigo.

jueves, 19 de agosto de 2010

In love!

Es todo tan perfecto, que casi no me creo que encaje sin esfuerzo.
Eres como la mitad que me faltaba, la pieza del puzzle que no encontraba.
A veces es inevitable la comparación pero es que en este caso, aun echando la vista atrás, sólo puedo sacar aspectos positivos. Todo lo ha sido desde que te conocí y poco a poco fuiste formando parte de mi vida...
¡Estoy feliz! Por fin siento que algo marcha y será por eso por lo que cada vez me dejo llevar más y más. Da un poco de miedo pero se me da bien esto de arriesgarme, sobre todo sabiendo a ciencia cierta que merece la pena.
No sé cuanto tiempo más resistiré sin decirte lo que mi mirada te expresa a gritos cada vez que te miro. Pero rezo porque un día, sin más, de repente caigas en la cuenta.


¿Porqué no te dejas llevar? Sin poner ningún tipo de barrera, dejándome a mí, a nosotros ser libres por un momento, permitiéndonos a los dos ser los protagonistas de esto que sentimos y a lo que nos da miedo poner etiqueta. Deberías hacerlo por ti, por mi, porque sabes que no te fallaría nunca y porque sé que tú también lo sientes. Lo noto por más que quieras ocultarlo.

Tengo tanto para darte que puedo esperar lo que haga falta, de hecho eso es lo que hago. Y aunque a veces desespero porque necesito dártelo todo ya, también sé que necesitas tu tiempo. Éste no es sólo mi gran reto.

Ya lo he dicho. De una vez por todas he dejado que salga de mis pensamientos y se convierta en algo más real. Pasando de mi corazón, a mi mente, a mis sensaciones, a mis suspiros y por fin a la palabra... donde admito de una vez por todas que lo has conseguido.

No he podido resistir más. Te quiero.

martes, 3 de agosto de 2010

Decídete

Y de repente me paro a pensar y descubro que estoy cansada...
Pongo en juego mi estabilidad emocional una y otra vez, es el precio a pagar por "estar contigo". Es una lucha constante entre mi entrega y tu desapego.

Ganas vs. miedo
Paciencia vs. tiempo
Esperanza vs. inconstancia
Sueños vs. cruda realidad

No reclamo nada, tan sólo espero. Lo malo es que no debería esperar nada a cambio, es algo que no hay manera que aprenda. Aprender a no esperar, sobre todo porque rara vez pasa.
Si no pasas esta prueba, este gran reto que supone para ti, supongo que al fin y al cabo y por mucho que me duela, no eras el indicado. Es por eso que no miro más allá, bien porque no quiero llevarme otro golpe si al final decides rendirte o bien porque no me atrevo a soñar.


Debería de ser más positiva ¿no es cierto, Ana? pero en lo referente a este tema... Sabes que toda precaución me parece poca. Te veo tan distante y tan cerca a la vez, que la sensación de vértigo ante la incertidumbre, me deja sin aliento.

Nunca sé que esperar contigo. Ya no estoy para juegos, para idas y venidas. Lo creas o no, me cansa estar siempre dándole vueltas al mismo tema. Necesito algo de tu parte y lo necesito ya.

Todo cambiaría si fueras del todo sincero de una vez. Sincero contigo mismo respecto a lo que quieres conmigo y a lo que estás dispuesto a arriesgar. Atrévete, que si me toca esperarte sabes bien que lo haré. Sólo necesito que me garantizes que todo esto ha valido para algo. Decídete.