"Gracias por ser conmigo como no eres con nadie,
perdona por no ser contigo como soy con todo el mundo"
perdona por no ser contigo como soy con todo el mundo"
No son buenos tiempos para los soñadores... Aunque he de reconocer que en este momento de mi vida dudo mucho de que tan siquiera me apetezca soñar.
Dejarme llevar es una cosa, seguir mis verdaderos impulsos es otra
¡Totalmente diferente!
Necesito calma, respirar y sentir paz.
Es curioso como en cuestión de tiempo (segundos) pueden cambiar tantas cosas.
Me siento cómoda así. No quiero menos ni exigo mucho más. Me niego a esperar algo a cambio. Me cansa, me desespera, me d-e-s-ilusiona cada vez más... me aburre y me hace perder la confianza.
Es importante mantener la esperanza de que algún día llegará (y sé que lo hará, de eso no me cabe la menor duda). Sobre todo porque tengo tanto que dar, que tanto amor no se puede desperdiciar de ninguna de las maneras.
Me apetece estar sola. Oír música lenta -Coldplay es la banda sonora de mis pensamientos- mientras busco un rincón donde me llegue el aire y el brillo del Sol bañe mi cara.
Mmm sí, esto es lo que pasa por tener música melancólica de fondo. Acabo escribiendo frases de este estilo.
Tengo tanto que decir... que no sé si bien por la multitud de información, o por la incapacidad de saber darle orden a mis pensamientos soy incapaz de darle forma alguna a esto.
En realidad es pereza. Tengo tiempo de sobra.
Y hablando de sobras. Me sobra cierto tipo de gente últimamente.
Estoy reduciendo, por iniciativa propia, mi contacto con el exterior. Sí, poco a poco y por fin, me he vuelto mucho más selectiva.
No me apetece "abrirme" a cualquiera, aunque sí que estoy dispuesta a conocer, nunca me he negado a ello. Pero no, hoy sólo estoy con quien de verdad me apetece. Cero imposiciones y muchas ganas de ser yo en todo momento y disfrutar, sobre todo eso.
¿Sabes qué? Me gustaría saber si soy mínimamente especial para ti. Y es algo que cuestiono porque son muchas las veces en las que me haces dudar.
Hoy por hoy, no necesito nada más. Ya han habido distracciones que me han hecho reaccionar (...) Que simples son las cosas y que necesidad absurda de complicarlas hasta el infinito.
Ya no es como ayer y aun no sé que me deparará mañana.
La diferencia es que ya no tengo miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario