Hay maneras y maneras de querer. Es todo tan subjetivo... No todo el mundo siente igual y mucho menos es posible llegar a comparar una forma de querer con otra.
Cuando me decías que me querías, a la vez que los dos sabíamos perfectamente que me eras infiel, no sé que te llevaba a hacerlo.
No me refiero al hecho de serme infiel con cualquier tia que se te pusiera delante, ya que eso era un problema tuyo y no mío. Sé de buena tinta que jamás tuviste una queja por mi parte. Demasiado bien que me porté...
Lo único que llegaba a plantearme era esa forma tan "especial" que tenías de querer. Porque ¿cómo es posible que me digas algo semejante cuando me faltas al respeto constantemente? Yo jamás pude, y será por eso mismo, porque queríamos de manera diferente.
Es por eso lo de "no me quieras tanto sino mejor". No me vale que me jures amor eterno o que me prometas el cielo y la tierra si no eres capaz de pensar en mi cuando una cualquiera se te pone delante.
Si te entrego lo mejor de mi es para que lo valores, para que sepas apreciar algo a lo que muy pocas personas han podido acceder, para que si me abro a ti completamente no sea para que puedas hacerme daño, sino para que me conozcas y me protejas, para que me quieras y me cuides. Simplemente para que intentes cumplir todas tus promesas...
Es ahora cuando de nuevo siento miedo. Ni quiero, ni puedo permitirme volver a pasar por lo mismo. Ojalá pudiera sera más fria y distante, ojalá aprendiera a querer mucho menos, ojalá todos estos palos me sirvieran de algo, porque realmente me da pánico volver a sentir y pasar por lo mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario